Los perfumes Amouage representan el lujo. Fundada en 1983, esta casa de fragancias basa su inspiración en su lugar de nacimiento: el Sultanato de Omán. Efectivamente, Amouage, con sede en la ciudad de Seeb (Muscat), nace del deseo de un miembro de la familia real de Omán de devolver el antiguo esplendor a la perfumería árabe. Ese sueño se hizo realidad, gracias al profesionalismo de Guy Robert, uno de los expertos más cotizados, dentro de la industria de la perfumería en Francia.
La palabra “Amouage” es una combinación de dos vocablos: el árabe “amwaj” (onda) y el francés “amour” (amor). Algo así como “ondas de amor o emoción”. El nombre de la firma refleja, a la perfección, la esencia de sus fragancias. De hecho, Amouage transmite la gracia, el esplendor y el amor, considerado por sus fundadores el don más perfecto de todos.
Los aromas característicos de esta colección de fragancias únicas y atemporales son incomparables y provienen de materias primas muy poco comunes, como el incienso o el heliantemo, un tipo de rosa que crece en las montañas de Jebel Akhdar, en Omán. ¿El resultado? Una línea de perfumes de uso exclusivo. Entre ellos, la fragancia más preciosa del mundo: Gold Perfume.
La perfumería que produce estas fabulosas esencias presta especial atención al detalle, que identifica a todo lo árabe. Esto también está presente en las presentaciones de sus perfumes, de lo más sofisticados, que se venden en singulares frascos, que convierten a estas fragancias en verdaderos objetos de lujo y esplendor.
Por eso, si estás por regalar un aroma inolvidable, no dudes en optar por Amouage, sinónimo de lujo, calidad y sofisticación.