Becky G no solo brilló por su talento en los Latin Grammy 2024, sino también por sus audaces y sofisticadas elecciones de moda que rápidamente la posicionaron como una de las mejor vestidas de la noche. La cantante californiana, nominada a Mejor Canción Regional Mexicana, aprovechó esta oportunidad para arrasar en la alfombra roja con dos looks que fueron una verdadera oda a la sensualidad y la elegancia, consolidando su estatus como una de las artistas más influyentes en cuanto a estilo se refiere.
Naked Dress estilo sirena: Brillante y cautivador
El primer look de Becky G fue todo un espectáculo visual: un naked dress estilo sirena diseñado por el prestigioso diseñador libanés Tony Ward. En un blanco nupcial que parecía sacado de un sueño, este vestido de lentejuelas metálicas y perlas se ceñía a su figura, creando un efecto de transparencia que resultaba tanto sofisticado como audaz. La tela de tul, ligera y etérea, se extendía en una majestuosa cola XXL, sumando un aire dramático y de cuento de hadas. Pero lo que realmente diferenciaba a este look de otros naked dresses que hemos visto en alfombras rojas, era el aura de cola de sirena que aportaba el encaje del tul, transformando a Becky G en una musa moderna, lista para deslizarse entre las olas de la moda.
Este vestido, que fusionaba la sensualidad con la elegancia, fue complementado con unos tacones metalizados de Jimmy Choo que resplandecían a juego con las lentejuelas que recubrían el vestido, creando una armonía de brillo que no pasó desapercibida. Para mantener el equilibrio, Becky G optó por un peinado recogido con mechones sueltos, un toque sutil pero elegante que complementaba la atmósfera ligera del vestido. El maquillaje fue sencillo, con énfasis en los labios en tonos nude, mientras que los pendientes de diamantes en cascada de Maison H Jewels añadían el toque final de lujo.
El poder del rojo: Un segundo look inolvidable
Becky G no se detuvo ahí. En su segundo cambio de look de la noche, la cantante hizo alusión al estilo nupcial, pero con una explosión de sensualidad y audacia. Esta vez optó por un naked dress de color rojo intenso, que jugaba con las transparencias de una manera más arriesgada. Las aberturas estratégicas del vestido permitían que se entreviera la lencería, otorgándole una sensualidad indiscutible y un toque de rebeldía que contrastaba con el look blanco de sirena que había lucido previamente. El vestido, adornado con pedrerías y bordados que atrapaban la luz, combinaba a la perfección con el velo rojo que Becky G llevaba, que caía hasta el suelo en una elegancia indiscutible.
Este look, con un toque más atrevido y seductor, marcó la diferencia en la velada. La cantante se presentaba como una novia que rompe los cánones tradicionales, una mujer poderosa que se reinventa en cada paso que da. Y es que, a pesar de su sensualidad, el conjunto no carecía de sofisticación: su melena suelta y un maquillaje natural, con un enfoque en los labios, equilibraron la audacia del vestido, haciendo que Becky G se viera tan elegante como sexy.
Una noche de moda y empoderamiento
Lo que hizo que los looks de Becky G fueran verdaderamente inolvidables fue su capacidad para mezclar la alta costura con un toque personal que nunca deja de sorprender. Al combinar el estilo naked dress con el glamour y la sensualidad de la alfombra roja, Becky G no solo confirmó su lugar como una de las artistas más importantes del momento, sino también como una de las figuras más arriesgadas y originales de la moda contemporánea.
En esta edición de los Latin Grammy, Becky G no solo dejó una marca en la música, sino también en la historia de la moda de la alfombra roja, demostrando que, a veces, la moda es tan poderosa como la música misma. De sirena nupcial a novia rebelde, su paso por los premios fue una declaración de confianza, estilo y autenticidad que será recordada mucho después de que las luces se apaguen.