Es importante promover el consumo de productos de belleza y cuidado personal sostenibles, a fin de contribuir de manera positiva con el medio ambiente y con las comunidades que habitan en dichos espacios. El objetivo es generar productos ecoamigables y socialmente responsables, que nos permitan cuidar nuestra piel con los elementos que la naturaleza nos provee.
En esa línea, podemos entender a las empresas sustentables como aquellas que buscan el éxito en diversos aspectos como el bienestar de sus empleados, la calidad de sus productos o servicios, el origen de sus insumos o el impacto ambiental social, político y económico de su actividad, tomando en cuenta el desarrollo social y económico de su país.
En este contexto de sostenibilidad global, vemos cómo en el rubro de la belleza también se realizan esfuerzos hacia ese objetivo. Así lo señala la gerente de marketing de Oriflame, Caroline Charpentier, quien resalta las líneas amigables con el medio ambiente que posee su organización, una compañía sueca de belleza número uno en venta directa, y que se preocupa de forma sincera por el cuidado del planeta.
Entre ellas destacan Eco Beauty y Love Nature, dos líneas de producto elaboradas con fórmulas biodegradables, las cuales se descomponen de forma natural sin causar ningún tipo de impacto negativo en el ambiente. En sus productos también utilizan micropartículas de origen vegetal como semillas de frambuesa o cáscaras de almendras, y no partículas de plástico que podrían ser consumidas por especies marítimas.
“Asimismo, existen sellos que acreditan el desarrollo sustentable de nuestros implementos para el cuidado de la piel y maquillaje, los cuales respaldan las decisiones responsables que tomamos en los procesos de elaboración de nuestros productos” señala la gerente de marketing de Oriflame, resaltando el valor de sus sellos Eco-cert, los cuales representan un símbolo de garantía para su línea Eco Beauty, conocida por ser 100% orgánica.
Por su parte, los sellos FSC aseguran que los empaques de Oriflame estén fabricados con papel elaborado en base a bosques sostenibles, mientras que el sello Fair Trade brinda a los consumidores la seguridad que los ingredientes empleados para sus productos provienen de comunidades que han sido tratadas de forma justa y ética.
“Cabe destacar que el 100% de nuestros empaques son reciclables, inclusive utilizamos un porcentaje de plástico reciclado post-consumo. A esto se suma el hecho que en nuestros productos evitamos el uso de químicos como los parabenos, las siliconas, los aceites minerales o las fragancias sintéticas en su elaboración, para así prevenir daños posteriores a pieles sensibles”, agrega Charpentier.
Si se analiza el concepto de sustentabilidad desde una visión más amplia, hay que recordar que uno de los países más resaltantes por su contribución con el medio ambiente y sus iniciativas para cuidar el planeta es Suecia. Este país europeo mantiene una filosofía responsable con la preservación de la naturaleza, especialmente en la manera de trabajo de sus diversas compañías y marcas nacionales.
En ese sentido, Oriflame es considerada una de las principales empresas suecas del sector belleza y cuidado personal, contando con más de 50 años en nuestro país, durante los cuales ha compartido las experiencias de su filosofía sustentable a través de sus líneas ecoamigables, elaboradas con ingredientes naturales y siguiendo estándares medioambientales europeos para la fabricación de cada producto