4 perfumes unisex que dejan huella y son maravillosos para regalar o autoregalarse en San Valentín

Para todos y todas, para regalarte a ti misma, para sorprender...La selección de perfumes clásicos renovados y novedades más completa para elegir tu regalo el próximo San Valentín. ¡Y que viva el amor!

Para regalar, para autoregalarse, para conquistar… no importan los motivos, los perfumes son siempre muy bien recibidos y, en San Valentín se convierten en un regalo perfecto, de esos con los que es difícil fallar. Así que, si te encuentras en la tesitura de elegir un perfume para el día de los enamorados y aún no te has decidido, nosotras con esta selección queremos ponértelo un poco más fácil.

Nuestra recomendación va en una línea más neutra, los perfumes unisex, que gustan por igual a todo el mundo, y al no tener género sus notas casan igual de bien en hombres como en mujeres. Y sí, cada vez más las firmas apuestan por este tipo de fragancias que rompen con los estereotipos de género.

-Jean Paul Gaultier Classique Pride, es una fragancia que amarán por igual las mujeres y los hombres. Sus notas son una mezcla de cítricos chispeantes, neroli, y toques de maderas rubias almizcladas que hacen que sea una fragancia sensual y muy atractiva.

Hermès L’Ombre des Merveilles, es un perfume de la familia olfativa oriental amaderada, para hombres y mujeres que buscan una fragancia intensa que les haga soñar en el tiempo. Cuenta con notas de té negro, incienso y madera de haba tonka.

Calvin Klein CK Everyone, las fragancias de CK son todo un clásico en esto de los perfumes unisex. Este concretamente tiene un aroma limpio y fresco que se adapta a todas las personalidades. Se trata de un perfume intenso, con energía cítrica como el té verde y el limón, notas dulces de jazmín y lichi, y toques amaderados de cedro y un fondo de ámbar.

perfume

Infusion d’Iris de Prada, aquí tenemos una perfume clásico y moderno de la familia olfativa almizcle floral amaderado, que crea una sensación de intemporalidad. Su fragancia se inicia con flores de naranjo, mandarina y neroli para dar paso a cítricos más dulces como el vetiver y termina con un fondo de iris amaderado.